lunes, 22 de diciembre de 2008

Los mejores de 2008

Acá están, estos son, los mejores discos del año, según la casa. Van sin ningun orden en particular, simplemente, fueron los que más me gustaron.

Bloc Party, Intimacy
Después de un segundo disco flojo, los BP sorprendieron con un álbum filoso, abrasivo y envolvente. Los mejores momentos pertenecen a esos oasis de melodías en medio de los picos electrificados a los que el grupo suele recurrir (a veces abusando de la pose punk). Un gran retorno, de todas formas.


Hercules and Love Affair, Hercules and love affair
Una actualización elegante, urbana y newyorker de una escena dance bastante devaluada y ahogada en esos horribles DVDS en vivo que editan los DJS superstars. Puaj. Frente a ese panorama, Hercules and Love Affair es un disco bien armado, con buenos temas, y que logra sostenerse más allá de los códigos propios del dance. Con eso le alcanza para estar entre los mejores del año.

Metallica, Death magnetic
Sorprendieron para bien. Por alguna razón escuché "Death magnetic" junto al demoradísimo regreso de Guns and Roses (ver review) y en la comparación salió ganando el de Metallica, que suena a reinvención (saludable) de la música vital que el grupo supo instalar hace muchos años. Como si se hubieran sacudido la modorra de estos últimos...¡18 años!

Hot Chip, Made in the dark
Siguen siendo de lo más prometedor de la electrónica mainstream, junto con Justice y los superiores Royksopp (mis favoritos, de los que esperamos ansiosos su tercer disco). "Made in..." arranca enrredado y loco y después se va poniendo pop y suelta todos sus trucos. Pasa hasta por ¡baladas! para volver a electricificarse y decir siempre algo más, en un trip completo, lleno de emociones.

Fleet Foxes, Fleet Foxes
Una calma casi religiosa le da un toque adictivo a este disco de los oriundos de Seattle, que me recuerdan a cosas de Animal Collective, de los Russian Futurists y sobre todo, de los Hidden Cameras (¿se acuerdan?) El disco más reposado, pastoral y etéreo del año.

Keane, Perfect symmetry
Me sorprendieron los Keane, una banda por la que nunca había logrado interesarme. Grabaron un disco en el que se desintoxicaorn de ellos mismos y transmiten la felicidad por hacer música, eso se nota ¡Hasta coquetean con el Bowie de "Ashes to ashes"!

The Teenagers, Reality check
Un disco que no aparece en las listas de fin de año que estuve revisando, pero que a mi me parece uno de los mejores momentos pop de 2008. Catarata de hits de un eletropop altamente adictivo, con estribillos memorables y pulso dance.

Vampire Weekend, Vampire weekend
Una válvula de escape, una brisa fresca de pop inocente, como concebido por pura diversión.


Primal Scream, Beautiful future
Si bien no fui demasiado benévolo con la crítica del disco (ver review), con el tiempo, "Beautiful..." ocupó su lugar con categoría. Aún a pesar de estar lejos de sus mejores marcas, les sobra para estar entre los mejores del año.


The Last Shadow Puppets, The age of undersantement
Lindo disco, sostenido, de un solo clima extendido. Como si mirara desde los 70´s, o quien sabe desde donde.


Cut Copy, In Ghost Colours
Otro de electrónica buena, que se salga de los códigos ultragastados del dance actual. Hits, sonido espacioso y con vuelo.


Discos: Hot space (Queen, 1982)

Si bien el pico de poderío de Queen se fijó entre 1975 y 1979, hay que convenir que "The Game" (1980) fue un gran disco de rock. Visceral y directo. Lleno de golpe, con mucho swing y poca floritura. Como si el grupo hubiera recortado toda la maleza innecesaria para ganar en transpiración.

Inmediatamente después del soundtrack para "Flash Gordon" vino este "Hot space", un disco que históricamente nunca cosechó buenas críticas pero que en Ultravivido bancamos a muerte. Un auténtico disco ninguneado en la historia del rock. Lo primero que habría que decir es que en "Hot space" los Queen parecieron darse algunos gustitos. El disco los muestra muy cercanos al soul, al funk, pero también al uso de las primeras máquinas de ritmos y teclados sintetizados.

Me gusta mucho ese gesto de querer transgredir, hoy que tantas banditas ínfimas se creen que mueven el tablero y no son capaces ni de cambiar su propia música. Los Queen estaban consagrados, venían de vender miles de discos, tenían todo para arriesgar y se salieron con un disco bastante intrépido, por lo menos.

El arranque, con "Staying power" no es el mejor, es cierto. Ess trompetas son realmente muy grasas. Pero enseguida llega "Dancer", poderoso rock, gordo y lento, donde el grupo empieza a pelar.

Luego comienzan las agradables sorpresas. "Back chat" demuestra la vocación del grupo por hacer- además- buena música. El tema está lleno de arreglos, de espacios (algo inédito hasta entonces en la música de Queen). Suena a noche, a discoteca. Uno de mis favoritos.

Otro momento de experimentación llega con "Body language", un proto funk con máquinas donde Freddie empieza a desatar su desfachatez de loca de escenario. "Give me your body", aúlla. Pero como para que los fans duros y tradicionales no se alteren, el grupo pega dos temas un poco más ortodoxos, aunque con algunas vueltas de tuerca originales: "Action this day" y "Put our the fire". Este último demuestra que la pólvora todavía no se les había mojado y sabían rockear. ¡Uf, poderoso!

"Life is real (song for Lennon)" lo dice todo en su título. Es Freddie jugando a ser John, con piano al frente y todo. Lindo momento. "Life is a bitch", desgrana, como al pasar, hacia el final. En el último cuarto del álbum siguen pasando cosas interesantes, como en "Calling all girls", un tema ambiguo, que comienza acústico y va cargando, hasta ganar terreno y autoridad, como casi toda la música de Queen.

Ya en la tríada final, llega "Las palabras de amor", una balada 100% Brian May, emocionada y con unos teclados muy 80´s que la rompen. Como última gema antes del final llega ese lujurioso coqueteo de Freddie con el soul que es "Cool cat" (¡lo que él mismo querría ser!). Falsetto, guitarras funky, una base con groove. Un tema que Jamiroquai envidiará por siempre.

El disco se podría terminar ahí (ya pasó por estilos, por momentos, fue divertido de verdad) pero falta un cierre de alto vuelo con el clásico "Under pressure".

Queen- discografía cercana
Flash Gordon (1980)- Hot space (1982)- The works (1984). 

jueves, 11 de diciembre de 2008

Discos: L.A Woman (The Doors, 1971)

En las discusiones con amigos siempre sostuve que el mejor disco de los Doors era "Strange days". Hace poco, reescuchando esta otra obra maestra del ´71, tuve que poner en duda mi teoría.  

"L.A woman" tiene mucha actitud. Pero no en el sentido de "aguante". Tiene actitud de decir "hagamos un gran disco". ¿Sabrían los Doors que era el último? Por otra parte, acá no hay un solo tema flojo. Y sobre todo, el disco exuda un rockanroll que convence por todos los costados.

Reescuchando "L.A. Woman" uno termina pensando que en el rock es muy importante no cagarse. Está lleno de grupos de rock que tienen miedo de tocar, de no sonar, de que "las condiciones no estén dadas"... Los Doors jamás tuvieron miedo de tocar. Y acá se sueltan como nunca.

El disco tiene, además, un vuelvo muy "free" en las interpretaciones (escucharlo con auriculares es una fiesta: hay arreglos, ambiente, un audio entre volado y terrenal, entre lo terroso y las luces de una gran ciudad de noche). Y esa cosa "free" gana vuelo en medio de temas muy bien armados. Porque hay que decirlo: el grupo sabia "cerrar" muy bien sus temas ¿Quién los editaba? En ningún caso hay minutos de más o de menos.


Los Doors siempre fueron buenos, además, creando climas. A lo largo de todo el disco hay detallecitos de teclados, climas ominosos, medio fantasmales (chequear la intro de "L.A Woman", "L´America" o "Riders on the storm").

Eso es muy Manzarek, claro. Y algo de Krieger, también. Pensándolo bien, los climas le da un toque medio oscuro a la música, que entraba en sintonía con la imagenería "William Blake" de Morrison. 

Un detalle: nunca me pude sacar de la cabeza la imagen de ese crucifijo pendiente de un poste de luz, en el booklet del disco. Muy, pero muy Morrison.

Un paseo por cada tema de "L.A woman"

1.- The changeling (8/10)
Gran apertura, en plan rock con toques funk. Los Angeles, Camaros, sol, autopistas. Salvaje interpretación de un Morrison que en este disco libera todo su blues. Qué cantante. Como en casi todo el disco, Jimbo se olvida (saludablemente) de sus viajes alucinógenos y baja a la tierra con letras más bluseras. "Vivi en la parte alta de la ciudad/ viví en la parte baja/ vivi en todas partes/ tuve dinero/ no tuve nada/ pero nunca estuve tan quebrado como para no poder dejar la ciudad". Gran interpretación de todos. Y gran final, acelerando el tempo con Morrison gritando "change, change, change".  

2.- Love her madly (8/10)
Siempre me asombró la capacidad de los Doors para hacer canciones, para tratar las melodías de una forma cristalina. Si bien eran salvajes y rockeros (y hasta desprolijos en vivo) siempre supieron redondear el formato canción. "Love her..." es llevadera y saltarina y dan ganas de cantarla.

3.- Been down so long (7/10)
Acá empieza a asomar el lado blusero del disco. "Estuve jodido tanto tiempo/ que esto me parece estar bien". ¿Cómo pudo la voz de Morrison cascarse así en menos de un año? (en "Morrison Hotel" -1970- todavía no estaba ni ahí así...) ¡A otros les llevó toda una carrera!

4.- Cars hiss by my window (7/10)
Los autos silban bajo mi ventana, gran título. Blues de la hora de la siesta. Con mi amigo Emilio siempre subíamos el volumen para escuchar las vociferaciones de borrachín de Morrison en el estudio (hagan la prueba). ¿A quién carajo está cagando a pedos? ¿Al técnico? No se sabe si está arengando a la banda o gritando que se va a la mierda, que no quiere grabar más. Parrafo aparte para el "solo" de guitarra de Jimbo...siempre nos cagábamos de risa en esa parte. En la letra aparecen esos fantasmas del tipo "una chica fría te matará/ en una habitación oscura".

5. -L.A Woman (10/10)
El mejor tema largo de toda la historia del rock. Acá esta todo lo que una banda de rock puede hacer: hay mucho groove. Hay armonías, ritmo, vuelo. Mucho vuelo. Todos los músicos tocan de una manera increíble y Morrison...bueno, él capitanea una intrepretación sublime para entrar y salir de cada pasaje del tema. Con sus picos hace subir a la banda hasta tocar las alturas. Orgásmico.

6.- L´America (8/10)
Acá empezaría el lado 2 del disco. Que tema raro y psicodélico y lleno de detalles. Me encanta. Tiene clima, tiene trip, tiene blues. Le da al disco un aire impresionante, porque después del tema anterior era difícil salir. Gran re-comienzo. Los Doors siempre se salían con alguna gemita, algo medio raro en los discos. Eran imaginativos, les gustaba probar cosas que no habían hecho hasta entonces.

7.- Hyacinth house (7/10)
Otra bonita canción. Contiene las antológicas líneas "Necesito un nuevo amigo que no me moleste/ un nuevo amigo que no me necesite".

8.- Crawling King Snake (7/10)
Vuelve el blues, con un cover de John Lee Hooker. Acá a veces dudo, porque una cosa es los Doors haciendo su propia interpretación del blues- pasado a su música- y otra es cuando hacían covers de standars clásicos (en vivo cubrían "Little red rooster" y no les salía gran cosa). En esta salen bien parados, con un Morrison con mucho carácter, arrastrando el tema. Endemoniadas guitarras de Robbie Krieger.

9.- The Wasp (Texas Radio and the Big Beat) (9/10)
Endemoniada también es la seguidilla de dinámicas, de partes, de retomes, en este tema. Otro approach blusero made in The Doors. Pulso, pulso, tempo firme. Morrison recitando detrás, on left channel. Todo esto está tocado magistralmente, los solos, los arreglos, todo.

10.- Riders on the storm (10/10)
Bueno. El disco ya estaba terminado, de alguna manera. Ya había cumplido ¿Qué más se podía agregar? A lo sumo, un temita más, para cerrar. Pero no: se salieron con esta maravilla. Un cierre ambiguo y magistral del álbum. Algo que se va cayendo, en un eterno fade out. Acá hay jazz y algo de lounge music, climática, espiralada. Chequear la voz superpuesta (susurrada) a la de Morrison. Uno de mis poemas favoritos de Jimbo, sobre todo cuando canta "The world on you depends/ our life will never ends". Y el solo superlativo de Manzarek, con mucho feeling jazzero. Too much.

Y algo más...(bonus)


* "L. A Woman" es un disco que justifica toda una vida de ahorros...¡para ponerse un bar!
* Un disco para escuchar con amigos. Bebiendo. Con sol.
* Un disco de carretera
* Un disco para asado con pileta
* Un disco para dejarse las patillas y usar unas buenas gafas
*Un disco de rock en el mejor sentido del término: libertad, música, vuelo, inspiración.
* El embrión de "L.A Woman" ya está en el "Queen of the highway" de "Morrison hotel" y otros temas de ese disco ("The spy", por ejemplo). Sin embargo, "Morrison..." parece un disco tímido al lado del blues de LA Woman.