Los discos de Ryuichi Sakamoto (en especial sus obras maestras de comienzos de los 90´s como Beauty o Heartbeat) ya forman parte de esa especie de cánon prefigurativo de mucha de la música que vendría después.
Si bien algunos de los sonidos que escuchamos en sus discos pueden sonar algo perimidos hoy (gajes del oficio del lenguaje electrónico) es probable que algunas ideas alojadas allí todavía puedan abrir mundos posibles de música. Será cuestión de revisarlos y repensar.
Y si no es eso, en el fondo se trata (en muchos momentos de estos discos) de gran música, de esa que perdura por el simple hecho de ser buena. ¿Es posible hablar de buena, mala y gran música? Claro, si hablamos de Sakamoto, es posible.
Massive Attack, St. Germain, Tricky, Bjork, Richard James, The Orb, Jamiroquai, Sakamoto: nombres más, nombres menos, el team de los que prefiguran y delinean la música de los 90´s y posteriores.
2. La música del mundo
Sakamoto tuvo la pretensión de componer y grabar la música total, la verdadera "world music". En ese audio entra todo (sobre todo, las ciudades y su tráfico humano y tecnológico: el auténtico sonido urbano de caos y armonía, de sistema de tránsito y de belleza, todo junto).
Uno se imagina viajando y llevando esta música y que funcione en cualquier sitio.
Están las exóticas (para nosotros, claro, imaginen un 1987 pre I-SAT) "melodías orientales"; está el embrión del hip hop, los samplers, "la música con computadoras" (guau!), pero sobre todo está ese elegante maquillaje netamente Euro que lo perfuma todo, en la música de Ryuichi.
Están las calles de París, de Tokyo y de New York, todas, en una misma música.
Si bien algunos de los sonidos que escuchamos en sus discos pueden sonar algo perimidos hoy (gajes del oficio del lenguaje electrónico) es probable que algunas ideas alojadas allí todavía puedan abrir mundos posibles de música. Será cuestión de revisarlos y repensar.
Y si no es eso, en el fondo se trata (en muchos momentos de estos discos) de gran música, de esa que perdura por el simple hecho de ser buena. ¿Es posible hablar de buena, mala y gran música? Claro, si hablamos de Sakamoto, es posible.
Massive Attack, St. Germain, Tricky, Bjork, Richard James, The Orb, Jamiroquai, Sakamoto: nombres más, nombres menos, el team de los que prefiguran y delinean la música de los 90´s y posteriores.
2. La música del mundo
Sakamoto tuvo la pretensión de componer y grabar la música total, la verdadera "world music". En ese audio entra todo (sobre todo, las ciudades y su tráfico humano y tecnológico: el auténtico sonido urbano de caos y armonía, de sistema de tránsito y de belleza, todo junto).
Uno se imagina viajando y llevando esta música y que funcione en cualquier sitio.
Están las exóticas (para nosotros, claro, imaginen un 1987 pre I-SAT) "melodías orientales"; está el embrión del hip hop, los samplers, "la música con computadoras" (guau!), pero sobre todo está ese elegante maquillaje netamente Euro que lo perfuma todo, en la música de Ryuichi.
Están las calles de París, de Tokyo y de New York, todas, en una misma música.
3.
A la altura de Neo Geo, Sakamoto no era ningún novato. Venía de formar parte de la Yellow Magic Orchestra y ya habia sacado no menos de ocho discos en solitario, incluidos los de su otra veta compositiva, los soundtracks. Pero fue a partir de éste álbum que su nombre empezó a sonar fuerte a nivel mundial.
Recuerdo ver decenas de veces el video de "Risky" en el único canal de videos que se podía ver acá en Argentina, el viejo Music 21. Era una música muy global, muy sexy y nueva. Y sobre todo nos preguntábamos ¿qué hace Iggy Pop cantando ahí?
Playlist/ tracks
Después de una corta y elegante intro al piano con Before long, entran los ritmos ondulantes (chequear esos heterodoxos bajones y subidas del volumen) de Neo Geo. Por su parte, Risky es una pieza de art pop inigualable en elegancia, cadencia y audio. Prefigura, además, la cruza de artistas de distintos géneros y escuelas tan 90´s y el coqueteo soul/ cool que es el trasfondo del primer Massive Attack.
Free trading es el sonido del mundo moderno. Se trata de uno de los mejores momentos del álbum, en una pieza derivativa que respira la libertad creativa y el placer de hacer música. El corazón creativo de Sakamoto está acá: una música que es un paisaje, un fragmento de mundo total.
Shogunade es tal vez uno de los temas donde más se nota cierta obsolencia de materiales. Una especie de funk hi tech que hoy podríamos desechar como anticuado. Tal vez el momento más flojo del álbum. Parata retoma los tonos medios. Esto es música de bares hi tech, claro. O de exposiciones de arte. Hay, otra vez, una intención de elaborar música por el placer de hacerlo (si fuera posible decirlo así, sin "discursos", aunque ya lo sabemos, ésa es su política).
Okinawa song- Chin Nuku Juushii es uno de esos clásicos ejercicios (hoy, cínicamente, podemos verlo como algo un tanto naif) de Ryuichi en los que se mezclan melodías orientales (más precisamente de Okinawa) con una estructura rítimica más cercana a nuestros oídos "occidentales". Hay mejores exponentes de estas mezclas en Beauty (1990) sin ir más lejos.
Y apenas queda tiempo para el cierre, con la elegancia europea de After all. Y ya. A volver a darle play y recomenzar.
Bonus
* Para Neo Geo, Ryuichi reunió un dream team impresionante de músicos que incluyó a Bootsy Collins en bajo, Tony Williams (aquel célebre batero del segundo quinteto de Miles Davis en los 60´s), Clive Smith, Sly Dunbar (chequear discos de Peter Gabriel), Iggy Pop y el errático Bill Laswell, entre otros.
A la altura de Neo Geo, Sakamoto no era ningún novato. Venía de formar parte de la Yellow Magic Orchestra y ya habia sacado no menos de ocho discos en solitario, incluidos los de su otra veta compositiva, los soundtracks. Pero fue a partir de éste álbum que su nombre empezó a sonar fuerte a nivel mundial.
Recuerdo ver decenas de veces el video de "Risky" en el único canal de videos que se podía ver acá en Argentina, el viejo Music 21. Era una música muy global, muy sexy y nueva. Y sobre todo nos preguntábamos ¿qué hace Iggy Pop cantando ahí?
Si miramos su duración, Neo Geo es algo así como un EP. Apenas ocho temas, en 34 minutos. Para mi gusto rankea un poco por debajo de esos otros grandes discos de Ryuichi, pero se trata de un buen álbum de todos modos.
Playlist/ tracks
Después de una corta y elegante intro al piano con Before long, entran los ritmos ondulantes (chequear esos heterodoxos bajones y subidas del volumen) de Neo Geo. Por su parte, Risky es una pieza de art pop inigualable en elegancia, cadencia y audio. Prefigura, además, la cruza de artistas de distintos géneros y escuelas tan 90´s y el coqueteo soul/ cool que es el trasfondo del primer Massive Attack.
Free trading es el sonido del mundo moderno. Se trata de uno de los mejores momentos del álbum, en una pieza derivativa que respira la libertad creativa y el placer de hacer música. El corazón creativo de Sakamoto está acá: una música que es un paisaje, un fragmento de mundo total.
Shogunade es tal vez uno de los temas donde más se nota cierta obsolencia de materiales. Una especie de funk hi tech que hoy podríamos desechar como anticuado. Tal vez el momento más flojo del álbum. Parata retoma los tonos medios. Esto es música de bares hi tech, claro. O de exposiciones de arte. Hay, otra vez, una intención de elaborar música por el placer de hacerlo (si fuera posible decirlo así, sin "discursos", aunque ya lo sabemos, ésa es su política).
Okinawa song- Chin Nuku Juushii es uno de esos clásicos ejercicios (hoy, cínicamente, podemos verlo como algo un tanto naif) de Ryuichi en los que se mezclan melodías orientales (más precisamente de Okinawa) con una estructura rítimica más cercana a nuestros oídos "occidentales". Hay mejores exponentes de estas mezclas en Beauty (1990) sin ir más lejos.
Y apenas queda tiempo para el cierre, con la elegancia europea de After all. Y ya. A volver a darle play y recomenzar.
Bonus
* Para Neo Geo, Ryuichi reunió un dream team impresionante de músicos que incluyó a Bootsy Collins en bajo, Tony Williams (aquel célebre batero del segundo quinteto de Miles Davis en los 60´s), Clive Smith, Sly Dunbar (chequear discos de Peter Gabriel), Iggy Pop y el errático Bill Laswell, entre otros.